Azcué no dudó en sostener que «muchos de ellos son víctimas del oportunismo político, con anuncios que aparecen a diez días de las elecciones que lejos están de la realidad que los afecta, con una economía cada vez más débil y una inflación cada vez más dura».
Lamentablemente, como producto de esto último, «hay trabajadores públicos de nuestra ciudad, asalariados, que están por debajo de la línea de pobreza y ni hablemos de los que viven con contratos precarios o son monotributistas desde hace años».
«El trabajador municipal debe ser jerarquizado y no usado con un sistema prebendario. Desde el 10 de diciembre se termina todo esto», concluyó el candidato a intendente de JxER.